Tras el incremento en el caudal del caño La Unión, que afectó el sistema de acueducto comunitario de las veredas Las Mercedes y La Unión, las autoridades departamentales y municipales activaron un plan de respuesta inmediata para asistir a las cerca de 3.000 personas que integran aproximadamente 600 familias que quedaron sin suministro de agua.
La directora de la Corporación Cultural Municipal de Villavicencio (Corcumvi), Lucila Gómez Torres, confirmó la implementación de medidas urgentes, incluyendo el envío de carrotanques para garantizar el abastecimiento de agua en la zona.
“Hemos trabajado articuladamente con el Instituto de Cultura del Meta, la empresa EDESA y Acueducto para atender esta emergencia. Ya iniciamos la distribución y continuaremos sin pausa”, aseguró Gómez.
Entre las acciones realizadas se encuentra la evaluación técnica del daño en la bocatoma del acueducto, liderada por EDESA; distribución de agua potable mediante carrotanques en coordinación con Corcumvi y monitoreo permanente para evitar afectaciones mayores en viviendas, tras la erosión de jarillones.
Aunque no se registraron daños graves en viviendas ni víctimas, la comunidad reportó inundaciones menores y acumulación de lodo en algunos sectores.
“El compromiso es acompañar a las familias hasta superar esta contingencia”, destacó el alcalde de Villavicencio, Alexander Baquero, anunciando la rápida coordinación entre su Administración y la Gobernación del Meta. El mandatario reafirmó que la presencia institucional se mantendrá en el área hasta la total normalización del servicio.
