Con el objetivo de propiciar espacios que generen bienestar en las comunidades, la administración ‘Villavicencio Cambia Contigo’, a través de la Secretaría de Salud, instaló la Mesa, Ciudades, Entornos y Ruralidades Saludables (CERS), en la que se socializó el proyecto de acuerdo que aprueba la política pública de ‘Hábitos y Estilos de Vida Saludable’ para la capital del Meta. La secretaria de Salud, Tanya Cortés González, indicó que la estrategia CERS permite el desarrollo y fortalecimiento de acciones en torno a modos, condiciones y estilos de vida bajo un enfoque de la promoción de la salud en los diferentes entornos de cada persona en la ciudad. “Estamos hablando de cambiar hábitos, estilos de vida, de generar condiciones, infraestructuras, estrategias, el transporte activo, la vivienda digna, el agua potable; todo esto enmarca lo que es un estilo de vida saludable. Por eso CERS es ese espacio de articulación y de ayuda mutua para llegar a la meta de ser una ciudad saludable y sostenible”, indicó Cortés González. En esta mesa CERS está las instituciones de educación superior, que también adelantan acciones encaminadas a mejorar las condiciones de vida saludables de sus comunidades educativas. Lorena Riveros, enfermera del área de bienestar universitario de la Universidad Autónoma de Nariño (AUNAR), precisó que esta política pública motiva a la comunidad a cambiar sus estilos. “También es muy importante comprender cómo podemos nosotros cambiar nuestras estrategias o implementar o mejorar las que ya manejamos para llegar a la comunidad estudiantil”, manifestó. Por su parte, Carmenza Gutiérrez, profesional de la Secretaría de Educación de Villavicencio, señaló que hacía falta que la capital del Meta implementara esta política pública de estilos de vida saludable: “Más que necesaria era urgente, porque el municipio ha crecido bastante en su población y las necesidades a nivel de salud, y es necesario educar en este sentido de estilos de vida saludable”. De acuerdo con la OMS “La estrategia de Ciudades Saludables promueve el compromiso de las ciudades, de sus gobernantes y ciudadanos, con la mejoría continua de su salud. Desde la comprensión de la salud, no solo como ausencia de la enfermedad, sino como un estado elevado de bienestar biológico, psíquico y social”.