Nueva instalación de seguridad protege a niños, comerciantes y vecinos del sector del CDI hogar del niño

Nueva instalación de seguridad protege a niños, comerciantes y vecinos del sector del CDI hogar del niño

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En un esfuerzo conjunto por garantizar la seguridad y el bienestar en el barrio San Isidro, la Alta Consejería para la Seguridad Ciudadana, brindó apoyo técnico y profesional para la instalación de un sistema de cámaras y alarma.

Con esta intervención se beneficia a la comunidad educativa, el entorno comercial y residencial cercano al Centro de Desarrollo Infantil Hogar del Niño del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.

“Desde la Alta Consejería estamos comprometidos con la seguridad de la comunidad en general. A través de nuestra estrategia del Laboratorio Móvil de Alarmas, estamos llegando a comunas y corregimientos, articulados con la Policía y la Comunidad. Esta es una labor de corresponsabilidad para lograr entornos seguros”, expresó el coronel (r) Luis Eduardo Castro Barrero, Alto Consejero para la Seguridad Ciudadana.

Por su parte, la coordinadora del CDI, Nancy Méndez Salgado, destacó la transformación positiva que ha tenido el entorno gracias a esta intervención. Señaló que la institución enfrentaba problemas relacionados con el consumo de sustancias psicoactivas en los alrededores, acumulación de residuos y la presencia de habitantes de vivienda no formal, factores que afectaban la tranquilidad y la seguridad.

“Nuestro entorno y los espacios que utilizan los niños han mejorado notablemente. Estas acciones responden a una necesidad urgente de mejorar las condiciones de seguridad y limpieza del área que rodea al CDI”, afirmó la Coordinadora.

Méndez Salgado, explicó que las cámaras fueron adquiridas con recursos propios de la institución desde principios del año. Sin embargo, fue la gestión del equipo técnico de la Alta Consejería la que permitió su correcta instalación y operación. Agradeció también el apoyo del concejal Javier Robayo, quien donó la alarma que ahora refuerza la vigilancia del lugar.

Con la instalación de las tres cámaras y la alarma de seguridad permite ahora una respuesta más rápida y eficaz ante cualquier eventualidad, ya que está conectado con actores locales y se convierte en un punto de vigilancia para el entorno. Además de beneficiar directamente a los más de 200 niños y niñas entre los 2 y 5 años que estudian en el CDI, también fortalece el tejido social, mejorando la percepción de seguridad entre residentes y comerciantes del área.

Esta intervención demuestra la importancia de la articulación entre la comunidad, la Policía y la Administración Municipal en la construcción de espacios comunitarios más seguros y funcionales.