Después de dos horas de espera en las instalaciones de la Alcaldía, los coordinadores del paro no se acercaron a la reunión convocada por ellos para levantar el paro de transportadores del servicio público colectivo, que cumple dos días sin prestar el servicio a los usuarios. “Estuvimos esperando con toda la institucionalidad y el equipo encabezado por el alcalde, asesores del despacho, representantes de la Personería y la Procuraduría, y el equipo de la Secretaría de Movilidad, con una agenda programada para ofrecer soluciones y llegar a acuerdos para levantar el paro y que los ciudadanos puedan desplazarse”, expresó Rodolfo López, secretario de Movilidad.En cuanto a algunas de las peticiones de los manifestantes, relacionadas con una lista de precios de chatarrización de cara a migrar hacia el Sistema Estratégico de Transporte Público (SETP) planteado por la administración anterior, López afirmó que no es viable teniendo en cuenta que el municipio no cumplió con los requisitos mínimos de acuerdo con la guía metodológica que establece el Ministerio de Transporte y que sería una de las razones más importantes del paro.“Esto nos tiene hoy en esta situación porque a propietarios de vehículos y conductores se les creó un escenario incierto. Desde el punto de vista legal, la migración no es viable toda vez que el MinTransporte cuenta con un presupuesto de 1 billón de pesos para este cambio en todo el país y su costo en el municipio asciende a 1.2 billones. Adicionalmente, el funcionario agregó que la motivación que ocasionó el paro de transportadores se debe a la no aplicación de la Ley 2198 de 2022 sobre la ampliación de la vida útil de los vehículos: “Si bien es cierto que les cobija la medida, no se les puede renovar la tarjeta de operación ya que los buses no cuentan con Soat, revisión técnico-mecánica, medidas de seguridad, y algunos están en reparación. Además, deben pasar las inspecciones oculares y contar con los documentos para que puedan circular”.Aun así, el Gobierno municipal mostró voluntad para instalar una nueva mesa de diálogo que permita llegar a acuerdos que beneficie al gremio sin afectar al municipio ni a los ciudadanos.
