Mediante la realización de aforos, la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Villavicencio (EAAV) avanza en el cumplimiento de las disposiciones establecidas en las licencias ambientales de Cormacarena sobre las fuentes hídricas superficiales y subterráneas.‘’Los aforos se hacen especialmente para mirar cuánto caudal hay en la fuente y, asimismo, saber cuánto podemos captar, porque si está el caudal bajo solo podemos captar el 50 por ciento de agua que hay en la fuente; realmente es una labor importante porque nos permite velar por el caudal ecológico’’, explicó Aurora Romero, ingeniera ambiental de la Gerencia de Planeación de EAAV. Dos veces al año, en temporada seca, se llevan a cabo los aforos para saber el caudal de las fuentes hídricas, los cuales inician desde Quebrada Honda hasta llegar a las demás fuentes y así supervisar su comportamiento, según las condiciones climáticas. ‘‘En lo que va del 2023 hemos realizado aforos en Quebrada Honda, así como los caños Blanco, La Unión, Maizaro y Buque; el trabajo consta en medir el ancho de la fuente en cuestión mediante una división y, en cada punto, tomamos la medida en cuanto a la velocidad del agua para posteriormente, por cálculos, hallar el caudal’’, agregó Romero. La información recopilada y calculada se envía a la corporación ambiental Cormacarena con el fin de cumplir con cada obligación que viene inmersa en los permisos ambientales establecidos. Desde la EAAV reafirmamos nuestro compromiso con la gestión eficiente, ecológica y sostenible de los recursos hídricos y aumentar también la seguridad de las personas y del medio ambiente.
